No hay tregua ni descanso semanal que valga. El Gobierno acabó la semana pasada bajo el fuego cruzado del informe de la UCO que convierte el caso Koldo en el caso Ábalos y ese extraño auto del supremo que investiga al fiscal general por decir la verdad. Además, el fin de semana le ha traído un confuso incidente y un extraño accidente que el ministro puente va a investigar y que ha convertido a Madrid en una ratonera para miles de viajeros.