Según una reciente encuesta de la OCU, el 40% de los españoles bebe agua embotellada porque asegura que la del grifo no le sabe bien. Son los ciudadanos de la Comunidad Valenciana, Cataluña, Andalucía o Aragón, que pagan 100 veces más al año que los que sí beben agua corriente. Analizamos el por qué de esta decisión y la posibilidad de mejorar la calidad del agua en nuestro país, junto a Adela Molina, compañera de la sección de Sociedad de la SER y Luis Babiano, gerente de la Asociación Española de Operadores Públicos de Abastecimiento y Saneamiento.